BlancaCamino a las Landas (Francia)
Hoy amanecemos en San Sebastián, pero nos dirigimos hacia Hondorrieta, un pueblo muy típico con pisitos coloridos, callecitas y peculiares encantadoras casas junto a una bonita playa y un puerto que vimos por el camino hacía sus afueras, donde llegaremos por sorpresa a los curiosos (filchs) de Hondarribia a sus afueras.
Hicimos una excursión entre árboles y vegetación (preciosa) donde aprendí que en este lugar del País Vasco es uno de los más húmedos de la zona y hay muchas especies interesantes adaptadas a este clima, pero a la vez emigran otras sin ser este uno de sus climas subsistables y las tienen que apartarlas.
Después de pasear acabamos encontrando una gran playa rocosa con acantilados en medio de la vegetación, y como contábamos con algunos lugareños que paseaban por allí nos dijeron que nos podíamos bañar en una pequeña playita que se formaba entre las imponentes rocas antes de que subiese la marea, así que, como ya adivinareis, pasamos la mañana en este natural e inesperado lugar junto a gigantes formaciones rocosas y un gran mar.
A la hora de la comida, encontramos un sitio para comer en la vegetación al lado del faro de Hondarribia. Después de esto, decidimos emprender ya otra nueva parte de nuestro viaje, por lo que nos dirigimos hacia el suroeste de Francia, una zona concretamente conocida como » Las Landas», y finalmente, llegamos a Capbreton, un típico pueblecito Francés que recorrimos con la autocaravana empezando a ver ya las tipicas construcciones de casas de una planta del suroeste de Francia, también con un gran puerto, y pasamos la tarde en la playa del «Ocean».
Llamada así ya que da directamente al Océano Atlántico, es también una playa muy típica entre los surfistas, ya que tiene unas unas marcadas olas, en la que nosotros simplemente disfrutamos refrescandonos un poco en las pequeñas islas de agua que formaban estás en la zona de arena.
