Zumaya y San Sebastián
Empezamos la mañana dirigiéndonos a Zumaya, vemos si Iglesia y sus encantadoras casitas, pero lo más impresionante y famoso de este lugar sin lugar a dudas son los filchs, una extreña pero a la vez sorprendente formación rocosa que se ha ido formando a través del tiempo.

Os lo explico, lo primero que tenemos que tener en cuenta es que antiguamente estás rocas pertenecían a entornos submarinos, e incluso hoy en día con marea alta no se pueden llegar a ver los mas subterráneos, ya que los cubre la marea. Pero nosotros tuvimos la suerte de poder bajar y observarlos.

Estas rocas, en su interior tienen una formación muy dura y resistente, al contrario de su parte exterior, que es algo más blanda y moldeable, por lo cual, entre la erosión del viento y las rocas conseguimos ver esta extraña formación, este ecosistema cuenta con una diversidad de criaturas marinas de las más complejas del País Vasco.

Debamos saber que estos Filchs cuentan hoy en día con procesos de erosión activos y uno de los registros más importantes del 🌎.
Antes de la hora de la comida nos dirigimos hacia San Sebastián, la capital del País Vasco, fuimos en bici todo el día y lo pasamos super bien, pero también tengo que decir que fue uno de los días más aprovechados.

Empezamos recorriendo un trozo de vía verde ciclable que hay en San Sebastián y llegamos tras ver edificios🌇 muy elegantes a la playa de la Concha y el centro de las ciudad.
Nos impresionó, la playa en forma de concha y los preciosos y miles de edificios rodeándole. Nos adentramos en el centro, viendo su parque central con florecitas y el señorial Ayuntamiento, y poco después, acabamos tomando un montón de pinchos en una taberna típica de este lugar. Nos adentramos en el casco viejo de la ciudad, observando callecitas de color amarillento dirección a la gótica iglesia de la ciudad.

Me encantó lo característico de este punto, y era ese toque de color mágico salmón y amarillo que aparecían en las calles,además, vimos unos puentecillas muy curiosos que tenían los vecinos compartidos entre ellos. Recorremos la zona y nos tomamos un helado 🍦 en el parquecito central donde habíamos dejado aparcadas las bicis, y viendo las vistas de la playa de la Concha, además de una pequeña islita con un Santo en lo alto (accesible desde la parte vieja) recorremos está playa entre bonitos edificios y palacetes hasta la llegada al otro lado de la ciudad para visitar algo muy famoso de este lugar…

«El peine del viento» de Eduardo Chillida, un escultor que entre la ayuda de un arquitecto (que fue el que diseño la plaza en la que se sitúa el monumento) , ingenieros y otros diseñadores artísticos, mediante una colaboración llegaron a construir este monumento artístico, con la idea de unir el arte, junto naturaleza y ciudad mediante un peine que las una.
Después, tras apreciar unas bonitas vistas subimos en funicular 🚠 hacia el parque de atracciones del Monte Igueldo, donde disfrutamos unas impactantes e impresionantes vistas hacia la ciudad de San Sebastián y sus alrededores a la vez que nos montamos en pequeñas pero al mismo tiempo encantadoras atracciones.

Finalmente, emprendemos camino de vuelta hacia el centro donde vemos un espectacular atardecer entre montes y playa.
Y ya nos dirigimos al puerto de San Sebastián, al lado de la parte antigua de la ciudad (rodeada por una murallita) para cenar unas pizzas disfrutando bajo las luces de esta playa.

Una vez acabada la cena, bajo las estrellas emprendemos camino devuelta pasando por la gran e inimaginable catedral de San Sebastián, y siguiendo por la vía verde ciclable(como he nombrado antes, este ciudad es una de las mejores y más preparadas de España para poder recorrer en bicicleta). En el camino de vuelta, para finalizar el día, llegamos a ver un gran puente decorado con grandes muros blanco,s a la luz de la luna llena, antes de llegar a nuestra pequeña casita con ruedas.